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Ehécatl 4T, crónica de un negocio criminal

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Radicales Libres || Aníbal Muñiz Silva

Una vez más se demuestra que México no se preparó oportunamente para atender la pandemia al basarse en criterios políticos antes que científicos y en negocios personales antes que la vida humana.
Corrían los primeros meses de la pandemia y el brote en Europa se había salido de control. En Italia y España, que no se prepararon de manera correcta ni establecieron medidas sanitarias suficientes, se desbordaron los casos. Los hospitales se llenaron y la infraestructura de salud fue insuficiente para poder atender a personas que presentaban problemas respiratorios. Los ventiladores mecánicos, fundamentales para establecer un soporte de vida se agotaron y muchas personas murieron esperando ser intubados.
A finales de marzo, Seat, subsidiaria de Grupo VAG, presentó ventiladores de emergencia hechos para brindar un soporte de vida a enfermos graves. Para ello adaptaron componentes automotrices y usaron motores de limpiaparabrisas para accionar un ambú.
El mismo día, el MIT liberó un prototipo de manera similar para su uso en todo el mundo.
El Gobierno de España autorizó el 3 de abril a Seat la fabricación de dichos ventiladores. La armadora de autos procedió a adaptar una linea de producción y el 20 de Abril empezaron construir los ventiladores denominados Oxygen.

Alvarez Bullya, el engaño
3 días después, Maria Elena Alvarez Bullya, directora de Conacyt presentó en la Conferencia de Prensa del Presidente un programa para dotar a los hospitales de ventiladores fabricados por Conacyt. Y es ahí donde se desvela el engaño: La propuesta está basada en el modelo de emergencia liberado por el MIT.
Según la Doctora Alvarez Bullya, el 15 de mayo ya iban a estar listos dichos prototipos, pero no cumplieron con el plazo.
Fue hasta el mes de julio en que se presentaron en la Conferencia del Presidente.

El bloqueo a grupo VAG
Derivado del éxito en España, Grupo VAG, a través de su marca principal, Volkswagen de Mexico, anunció la construcción de 50 respiradores en su planta de Puebla, mismos que serían donados a los hospitales que lo requirieran.
De manera criminal, COFEPRIS bloqueó la distribución de los aparatos, que iban a ser distribuidos sin costo y que contaban con medidas de seguridad superiores a los que propuso el Conacyt.
Volkswagen de México se había comprometido a producir 15 mil ventiladores sin costo al gobierno ni hospitales.
La realidad es que en el Gobierno traían ya un jugoso negocio entre manos.

El negocio
Para la producción de ventiladores, el Conacyt de Alvarez Bullya entregó a la empresa DTM Tecnologías un monto de 168.4 millones de pesos del Fondo Institucional para el Desarrollo, Cientifico, Tecnológico y de Información, mediante el concepto «Diseño y Manufactura en Serie de ventiladores mecánicos invasivos para hacer frente a la pandemia del Covid19».
Conacyt estaba pagando por un diseño Open Source liberado por el MIT
La empresa DIT Tecnologías, había sido señalada por la misma Alvarez Bullya como una de las grandes beneficiarias de fondos de investigación al haber recibido de 2000 a 2018, 148.9 millones de pesos.
Es decir, la Doctora Alvarez Bullya en una sola ministración superó las aportaciones hechas en todo lo que va del siglo.
Además inflaron costos.
Se acuerdo al MIT, el costo del ventilador de emergencia es de 500 dólares. Por cada equipo denominado Ehecatl 4T, México pagó 137 mil pesos, aproximadamente 6600 dólares, es decir 13 veces más el costo original.
Y por si esto fuera poco, Conacyt a través de Corporación Mexicana de Investigación en Materiales, S.A. de C.V. (COMIMSA), una compañía asociada, pagó 1.22 millones de pesos al Colegio de Ingenieros Biomédicos de México AC por un dictamen de Opinión Técnica.
Conacyt erogó 140 millones de pesos por mil ventiladores en agosto, mientras que Volkswagen de México se había comprometido a entregar 15 mil sin costo desde Abril.
La negligencia del Gobierno de México en aras de hacer negocios al amparo del poder enlutaron familias de mexicanos pobres que murieron esperando un ventilador.
¿Cuántas vidas pudo haber salvado la iniciativa de Volkswagen?

Jiribilla
No hay manera de culpar al neoliberalismo de la ineptitud del Gobierno que por seguir un modelo de propaganda dejó a miles de personas sin acceso a un ventilador de emergencia.

*Master en Ingeniería, 20 años de experiencia en equipo médico, energías renovables y electrónica de semiconductores.

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